El trazado presenta una geometría sensiblemente elíptica en la que se sitúan las viviendas, mientras que los edificios públicos forman un conjunto sobre un porche a modo de eje, orientado este-oeste, a cuyos lados se colocan alternativamente las edificaciones que definen plazas abiertas a norte o a mediodía. En el amplio espacio interior delimitado por las manzanas de viviendas se colocan los edificios representativos. Desde este lugar se aprecian los grandes faldones inclinados de teja curva que cubren las plantas bajas de los edificios y constituyen una de las imágenes más sorprendentes del poblado, entre las que a veces sobresalen otros volúmenes correspondientes a las plantas altas, también cubiertas del mismo modo.

Las viviendas se abren al campo y las dependencias agrícolas se orientan hacia el amplio espacio interior de manera que se establece una separación de circulaciones, aunque la relación de la vivienda con los edificios públicos se realiza a través de la calle de acceso de carros. Las viviendas se parean y se unen de tres en tres, con las centrales retranqueadas respecto a las laterales, para evitar que las fachadas estén en un solo plano, tal como se indica en la memoria del proyecto: “Las viviendas de colonos con sus corrales y dependencias se proyectan pareadas y de forma que a pesar de su repetición ofrezcan una fachada con retranqueos y elementos de vegetación para la consecución del efecto estético que nos proponemos”.

Inscrito en el Catálogo General del Patrimonio Andaluz con fecha 21 de febrero de 2006.