BIBLIOTECA DEL INSTITUTO DE CULTURA HISPANICA DE MADRID. 1964
Ficha de proyecto
Al edificio original que se yergue en los límites del campus universitario de la Complutense, se le han añadido posteriormente edificaciones para dar solución a problemas de espacio, ya que las tareas del Instituto crecen a medida que pasa el tiempo y la cooperación con Iberoamérica se consolida en línea ascendente. En este sentido, la instalación y puesta en marcha de la principal institución que ha quedado de todo aquel intenso intercambio cultural, la Biblioteca Hispánica, llevó a plantear la construcción aneja de otro edificio.
Los arquitectos José Luis Fernández del Amo Moreno y Antonio Fernández Alba fueron los encargados de llevar a cabo el Proyecto. El desarrollo de la obra dura un año y el resultado es un edificio único donde se acoplan ingeniosamente las tres funciones básicas de una biblioteca: depósito de libros con gran capacidad de almacenamiento, salas de lectura con una extraordinaria luz natural y dependencias administrativas y culturales, cuyas formas pueden adivinarse a través de la volumetría exterior.
El edificio se dispone en torno al patio central siguiendo la complicada topografía del terreno pregonando sus formas expresionistas. Según las corrientes ideológicas del momento, con el organicismo como concepción del espacio, se establece un ámbito que entrelaza el humanismo y la naturaleza. Todo ello marca la forma triangular de la soberbia torre donde se alojan los depósitos, con los volúmenes en curva cuya sensualidad se aprecia en el tratamiento de las superficies en horizontal con la superposición de sus cuerpos sinuosamente volados.
Aúna el primer racionalismo español con el monumental eclecticismo de los años cuarenta, visible en la nostálgica presencia inmediata del Instituto al que complementaba y del igualmente cercano Museo de América.